Trasto deja en Valladolid el premio del Concurso Nacional de Tapas
El Pucella roll de Teo Rodríguez, basado en el lechazo, se impone en el certamen celebrado en la capital castellanoleonesa
Con un hojaldre relleno de guiso de lechazo con kare raisu (curry japonés), su salsa, demi glace y pistachos, Teo Rodríguez, del restaurante Trasto (Valladolid), se ha proclamado campeón del XIX del Concurso Nacional de Pinchos y Tapas 2023 celebrado en la capital castellanoleonesa.
Este Pucela roll le ha valido a Rodríguez los 10.000 euros del premio y el orgullo de dejar en su tierra el título de ganador del certamen, en el que se ha impuesto a 45 propuestas llegadas de toda España.
Le acompañaron en el podio la tapa trucha o tronko, un tartar de trucha arcoíris que emula un tronco en el río donde nace y se pesca la trucha presentad por Goiza Isiegas, de Akari Gastroteka (Pamplona) y el hagkao (tipo de gyoza) con tinta de calamar, relleno de rabo de toro, anguila, salsa XO y topping de sardina frita presentado por Jiale Pan, del restaurante vallisolitano Jiapan.
El cocinero de Trasto explica la receta: se parte de una masa de hojaldre, tipo croissant, que se enrolla y se introduce en un molde circular. «Se cuece en el horno, a 200º, durante 16 minutos. Por otro lado, se cocina el lechazo en bolsa de vacío durante 18 horas a 70º y después, se mezcla con el kare raisu. El rollo de hojaldre se vacía y se rellana del guiso. Por último, el roll se introduce en una demi glace de su cocción y se pasa por el pistacho».
Una idea que surgió de una reunión de equipo en el restaurante y que costó un mes trasladarla al plato.
Trasto abrió en julio de 2016 en el centro de Valladolid con Teo Rodríguez a la cabeza, luce un sol Repsol y tiene capacidad para unos 85 comensales. Su propuesta culinaria se basa en una cocina castellana «que ha viajado mucho para volver a sus raíces de manera renovada, fresca, creativa y muy universal».
Con el producto como base, Rodríguez y su equipo ofrecen al comensal una cocina de base tradicional con sabores que le trasladan a países asiáticos o latinoamericanos. Creaciones como la tosta de escabeche de gallina con emulsión de jalapeños, cebolla morada y mango; las gyozas de carrillera de ternera con chilli garlic y soja; el canelón de aguacate relleno de bonito marinado, yogur y salsa kimuchi o la sopa laksa de vieira, setas, leche de coco y salsa agripicante son ejemplos de este espíritu viajero.
Padrinos
Como viene siendo tradición, distintos bares y restaurantes de la ciudad apadrinan a cada uno de los finalistas, ofreciendo en sus locales la tapa con la que su ahijado ha disputado la final del concurso. Este año la novedad es que las tapas que participan en el certamen se podrán degustar en los establecimientos de la ciudad hasta el 12 de noviembre.
La tapa apadrinada por Trasto es la del cocinero Daniel Redondo Reche, del restaurante Depikofino de Sevilla, bautizada como El jamón es la ostia!!.
El jurado del Concurso Nacional de Pinchos y Tapas ha estado presidido por Iván Cerdeño, con dos estrellas Michelin y tres soles Repsol en su Cigarral del Ángel (Toledo), y conformado por Luis Veira (Árbore da Veira, con una estrella y dos soles en A Coruña), Montse Abellà (Velasco Abellà, Madrid) y María Jiménez, vicepresidenta de Mujeres en Gastronomía. A su votación se sumó la de un jurado popular.
En cuanto al Campeonato del Mundo de Tapas, el ganador ha sido Noel Moglia del restaurante Julita Wärdshus (Suecia), con un pan de patata frito relleno de crema de queso, cubierto con cebolla caramelizada glaseada con miel, chalota crujiente y tomillo limón.
