Faltan dos semanas para que se de a conocer la lista de los 50 mejores restaurantes del mundo y la organización del evento calienta motores revelando la nómina de restaurantes que, aunque no han pasado el corte, si se cuentan entre los 100 mejores del planeta.
Las noticias para la gastronomía española -que tiene muchas papeletas para alzarse con la primera posición el próximo 5 de junio en Las Vegas- no son sin embargo muy halagüeñas en la segunda mitad de la tabla, pues no hay novedades y sí alguna ausencia destacada.
Mugaritz sale por primera vez del ranking de los 50 primeros tras batir hace tres años el récord de permanencia en el top 10. Desde entonces ha iniciado una senda descendente que se confirma esta vez con el puesto número 81. El año pasado el grupo mediático William Reed que organiza el ránking le recompensó con el premio Icon y el auditorio le brindó una de las mayores ovaciones de la noche, pero parece que el idilio de Andoni Luis Aduriz con la 50Best se da por concluido.
A partir de ahí las ausencias pueden ser interpretadas de dos formas, o como un adiós definitivo o como un ascenso fulgurante. Azurmendi, que llegó a ser top 14 en 2019 -un año después de la celebración de la gala en Bilbao- y no aparece en la lista presentada esta semana, puede que se haya despedido del ránking, al menos de momento.
A la carrera de Eneko Atxa aún le quedan muchos cartuchos como para dar su proyección internacional por amortizada. Ricard Camarena por su parte podría dar la sorpresa, aunque tampoco parece probable. El año pasado figuraba en el puesto 96 y su ausencia en el tramo 51-100 podría significar un ascenso fulgurante, aunque siendo realistas, su propuesta no encaja del todo en la espectacularidad que suele premiar el ránking anglosajón.
Donde si parece que habrá buenas noticias es en la parte alta de la tabla, pues tres restaurantes españoles ocupan actualmente las posiciones 2, 3 y 4. Si se sigue la lógica impuesta en los últimos años, que impide a los ganadores de años anteriores repetir, al relegarlos a la categoría Best of the Best, lo más sensato es pensar que el barcelonés Disfrutar, el madrileño Diverxo o el vizcaíno Asador Etxebarri sucederán en unos días al peruano Central como mejor restaurante del mundo. Pero el sistema de escalafón es impredecible y habrá que esperar a la gala que se celebra el próximo 5 de junio en Las Vegas.