Alejandro Sánchez, cocinero y alma mater del restaurante de Roquetas de Mar que lleva su nombre y reconocido con una estrella Michelin, ha anunciado que abandona la gestión directa del local para emprender un nuevo rumbo profesional.
La semana pasada trasladaba su residencia a Hong Kong para entrar de lleno en la cocina del restaurante Mesa 15, con el objetivo de conseguir introducirlo en la constelación de la guía francesa, muy apreciada por los consumidores de la antigua colonia inglesa. En Mesa 15, inaugurado en enero de 2011, están funcionando muy bien algunos de los platos más emblemáticos del cocinero almeriense, como la lasaña de sardinas marinadas con ajoblanco y cerezas; el cochinillo confitado crujiente; las mini hamburguesas de costilla; o la lengua de ternera glaseada. Además, Alejandro Sánchez trabajará durante los próximos seis meses en la apertura de un segundo local que lleve lo mejor de la gastronomía española a Hong Kong. Posiblemente se trate de una arrocería, aunque el proyecto está por concretarse.
La gestión directa del restaurante Alejandro de Roquetas de Mar quedará en manos de la familia de Alejandro Sánchez, quien todos los días está en contacto ellos y los cocineros que quedarán al frente. En cuanto a la gestión de otros establecimientos, como Bacus (Aguadulce) y Alejandro Plaza Vieja (Almería) la distancia no será un problema, ya que el chef va a seguir vinculado directamente con la cocina de ambos gastrobares manteniendo un contacto diario, vía videoconferencia.
Encarnación Ruiz, madre del reconocido cocinero, afirmaba en el restaurante de Roquetas que su hijo estaba en contacto con los cocineros que se habían quedado aquí todos los días, por lo que la clientela no iba a notar la diferencia, incidiendo en que “a Alejandro le gustan los proyectos nuevos y avanzar, así que ahora va a pasar allí una larga temporada, pero hará varios viajes. Él cree que las perspectivas son muy buenas y por lo que nos dicen su cocina está triunfando y los socios están muy contentos. En poco más de un año desde que se abrió Mesa 15 el proyecto va muy bien y se decidieron a abrir otro establecimiento”.
Aunque el motivo principal del cambio de rumbo del cocinero almeriense se debe a su interés por implicarse en el proyecto de Hong Kong, también cabe recalcar que la crisis económica ha perjudicado la arriesgada propuesta que se ofrecía en el restaurante de Roquetas de Mar, que tampoco ha acabado de ser entendida por el público de una zona no habituada a la alta cocina. Una pena.
Fuente: Iñigo Mas Greño, «El Almería».