Ibiza desprende esa fuerza telúrica que atrapa al visitante en tantas y tantas ínsulas. En ese aspecto no es una excepción, como tampoco lo es cierto sometimiento, cuando no abandono, de sus valores tradicionales para contentar a un turista que ahora en verano invade la isla pitusa con ganas de diversión, de fiesta, y muchas veces relativo interés en la cultura local. He aquí una serie de pistas para evitar caer atrapado en la maraña de teppanyakis, pizzerías de saldo, hamburguesas de aquella manera, minimarkets, authentic spanish tapas bars y coctelería ‘piletera’, aquella que se trasiega en piscinas de hotel con (casi) más altavoces que hamacas.
Michelin ya ha bendecido a Es Tragón, La Gaia y Etxeko Ibiza, la pica en Baleares de Martín Berasategui. Y sabrás que Paco Roncero dirige allí Sublimotion, donde brinda una experiencia de alto contenido gastronómico, tecnológico y sensorial. Pero esta selección de bares y restaurantes normales va más allá de guías y grandes dispendios y, además, cuenta como prescriptores con profesionales que defienden una oferta diferente en Ibiza.
¿Quiénes te señalan los secretos mejor guardados del lugar? Álvaro Sanz y Elisa Hernández Alcalde, chef y responsable de sala (y bodega) en Es Tragón, respectivamente; Óscar Molina, cuerpo y alma de La Gaia; David Grussaute, Nahuel Livorno y Bartolomé Romero, chef, sumiller y maître de Unic; Vicente Roig, propietario de Es Tast; y Jorge Dávila, Premio Nacional de Gastronomía 2011, antaño maître de establecimientos tan destacados como A’Barra, Álbora y Zalacain, y actualmente Beverage and Costumer Service Manager de un gigante como Palladium Hotel Group. Buenos y variados anfitriones, convendrás.
Eivissa-Ibiza
Chidas Cantida. Plaça Pintor Vicent Calbet, 3.
Bar y cantina mexicana donde podrás buscar la armonía entre cócteles de agave y unos tacos que encantan a Óscar Molina. La casa anuncia platos para contentar tanto al carnívoro como al vegano y al flexitariano.
Es Tast. Av. Pere Matutes Noguera, 57.
En el extrarradio, a un paso ya de Playa d’en Bossa, se encuentra este sencillo bar restaurante donde acude el chef David Grussaute cuando quiere masticar la esencia de Ibiza. “Me gusta su arroz de matanzas, pero también te puedes comer un buen sofrit pagès. Todo muy casero, como se ha hecho siempre en las casas”, precisa.
La Barrita. Carrer de Canàries, 2.
Se jacta de ‘Gastro-Bar’ y sirve “tapas con una vuelta o su toque especial”. Eso destaca el sumiller Nahuel Livorno de una taberna “muy pequeñita, no muy conocida, muy personal y con cocina a la vista donde se come muy bien. Además, es un sitio low cost, no es muy caro para ir, tomarte una caña y comerte unas croquetas de kimchi y unos baos con gamba o papada de cerdo”.
Lydia’s. Joan d’Austria, 16. 07800 Eivissa. Tel. 670981895.
Una smokehouse de espíritu redneck, un homenaje a los tópicos del sur estadounidense donde comer burgers, hot dogs, paletilla y costillas de cerdo ahumadas, tacos, chili con carne… El chef Álvaro Sanz se decanta por “una hamburguesa muy rica con carne madurada y tuétano. Tipo americana, pero muy buena”. Al norte, en Sant Joan de Labritja, tiene un segundo despacho donde la carta se amplía con brisket.
Nou. Av. Sant Josep de Sa Talaia. Tel. 971300576.
Tiene aspecto de bar de barrio y se ubica junto a una gasolinera de Galp, en la avenida que toman quienes van y vienen a San José. Según Vicente Roig es “estupendo para comer unas tapas”. Ofrece bocadillos y clásicos del tapeo como el frito de pulpo, los sepionets a la plancha, los callos, la ensaladilla, las albóndigas, la lengua..
Re.art. Carrer de Castella, 9.
Jorge Dávila y Óscar Molina coinciden a la hora de recomendar el restaurante de David Reartes, quien pretende rendir homenaje a las tapas creativas y a las de toda la vida. “Realmente sorpréndete, una cocina llena de técnica, equilibrio, producto y gusto de la mano de un estudioso de la historia gastronómica de la isla”, asevera el primero. “Sencillito y con un concepto canalla. Ofrece tapas no convencionales, con su puntito, trabaja fermentos…”, amplía el chef.
Sant Antoni de Portmany-San Antonio
Can Tixedó. Ctra. Santa Inés, Carr. de Forada, Km 5.
Art Café & Grill son los apellidos de este establecimiento donde conviven la calma del campo ibicenco, exposiciones artísticas y carnes y pescados a la parrilla. La maître Elisa Hernández disfruta especialmente “tapas típicas como la frita de pulpo”.
Es Gerret. Carrer Vara de Rey, 23.
Es la casa de José González, chef y propietario que llama la atención por la utilización de distintas técnicas y su apuesta por un concepto para compartir donde el chef Óscar Molina encuentra, además, “producto muy bien elaborado y mucho sentido común”.
Es Ventall. Cervantes, 22.
Nació hace más de 35 años con intención de ser un referente de la cocina tradicional ibicenca y hoy, comandado por el chef José Miguel Bonet, Óscar Molina lo considera un muy buen restaurante. Un muy buen restaurante y, efectivamente, un verdadero exponente de “la parte más amable, más gustosa, más bien hecha de la cocina ibicenca”.
Sant Carles de Peralta-San Carlos
Ca N’Anneta. Plaza de la Iglesia, s/n. Tel. 971335090.
Se encuentra en el epicentro de la Ibiza hippy de los años sesenta y es famoso por el licor que elabora desde hace un siglo macerando hierbas del bosque en una base de anís. También se le conoce popularmente como Bar Anita, ofrece tapas y cocina casera, y es el preferido de Elisa Hernández, precisamente, “para tomar las mejores hierbas ibicencas”.
Salvadó. Platja de Carrer Pou des Lleó, s/n.
El bullit de peix con arroz a banda es la especialidad de este restaurante de alma marinera asomado al mar desde un pequeño acantilado de Canal d’en Martí. Se localiza entre casetas varadero, se surte en buena medida del pescado que capturan llaüts que faenan por la zona y es la elección de Vicente Roig “para comer un arroz espectacular”.
Sant Joan de Labritja-San Juan Bautista
Port Balansat. Port de Sant Miquel, s/n.
Arroces, pescados y mariscos son desde 1971 bandera de este restaurante de cocina marinera localizado frente a la playa del Port de Sant Miquel. Imagina el encanto de su terraza. Preparan pescado salvaje a la plancha, al horno, a la sal y a la espalda, y “su bullit de peix es una maravilla”. Palabra de Jorge Dávila.
Sant Jordi de Ses Salines
Can Pizza. C/ dels Pirineus, 9.
Margherita, Mortazza, Amatriciana, Veggie… Preparan hasta 24 pizzas diferentes, unas con tomate y mozzarella, otras sin tomate o sin mozzarella, y también veganas. Es la recomendación de Álvaro Sanz cerca del aeropuerto. ¿Qué tal una Jerry Tometo, Mejor Pizza de España en “estilo libre”, según Madrid Fusión 2021?
La Escollera. Playa Es Cavallet s/n.
Su ubicación en la reserva natural de Ses Salines procura envidiables vistas a Formentera, la playa de Es Cavallet y el Mediterráneo. “Solamente por su localización bien merece una visita”, subraya Jorge Dávila de un establecimiento donde se acude a comer paella, gallo San Pedro con patatas a lo pobre y lubina a la sal. Además, “todo está a un buen nivel, sin riesgos”.
Sant Josep de Sa Talaia-San José
Can Pujol. Ctra. de Port des Torrent.
Fundado en 1980, se ubica frente al mar y puede presumir de abrir durante todo el año. Ofrece pescados y mariscos varios y es el lugar escogido por Álvaro Sanz y Elisa Hernández cuando quieren darse un festín ictiófago en familia. Su demandado bullit de peix se elabora con pescado local del día (gallo San Pedro, mero, roja…) y se sirve sin patatas.
Es Galliner. Carrer del Ajuntament, 4.
Junto al ayuntamiento de San José, despacha tapas a la ibicenca, clásicos de ayer y de hoy (rabo, mollejas…) y carnes y pescados a la brasa. “Como producto bien tratado es excelentísimo”, resume Vicente Roig.
S’Illa des Bosc. Carretera de Cala Conta, s/n.
Promociona desayunos y aperitivos frente al mar, y en su amplia carta, bien surtida de carnes y pescados, destaca media decena de arroces, incluido un meloso de bogavante. Es el apartado preferido de Elisa Hernández, quien propone una bola extra en la propia Cala Conta: Sunset Ashram, “si la sobremesa se alarga” y apetecen un trago y una puesta de sol.
Sutil Carbón. Carrer Sa Pobla, 3.
Ubicado a pie de Playa d’en Bossa, es muy del gusto de Jorge Dávila al aunar “carnes, pescados y mariscos de calidad a la parrilla y una espectacular bodega”.
Unic. Begònies, 18.
“Cuando quiero dejarme sorprender o probar un menú degustación, recomendaría el Unic”. Vicente Roig se refiere al restaurante gastronómico del Hotel Migjorn Ibiza Suites & Spa, donde el chef bordelés David Grussaute pone en práctica lo que llama una cocina “de entorno cero”.
Santa Eulalia des Riu-Santa Eulalia del Río
Rías Atenea. Marià Riquer Wallis, 9.
En pleno paseo marítimo. “Cuando me siento allí, con mi café con leche, mi media tostada y veo el mar, me digo: ‘joé, qué suerte tengo de vivir a dos pasos’. No necesito más”. Así disfruta la calma del lugar David Grussaute.
Can Garage. Carr. Sta. Eulalia, Km. 3.3.
Los fans de las hamburguesas no deben pasar por alto Can Garage, en plena carretera. “Son muy simpáticos y me gusta el rollo de comer una buena burger, con un pan brioche, patata casera, rollo un poco rock and roll, con todo en madera, música y guirnaldas de colores. Parece que estás en medio de Estados Unidos”, resume David Grussaute.
Es Terral. Carrer de Sant Vicent, 47.
Cuando el río suena, agua lleva, y este pequeño bistró francés localizado en la ‘calle de los restaurantes’, junto al ayuntamiento, está en boca de casi todos los prescriptores. Abre todo el año, trabaja producto de temporada y trata muy bien la verdura. ¿Qué pedimos Elisa? “Destaco su salmón marinado con cítricos y sus alcachofas barigoule”.
Hämbre. Ricardo Curtoys Gotarredona, 1, Local 9C.
El bimi de Ibiza, con pesto de hierbas y piñones y ricotta salata. El raor frito, con allioli de alga nori y colinabo. “No es un tailandés, ni un español, ni un argentino”, señala Bartolomé Romeo. Y añade que “la carta es muy cambiante y en sala tiene una sumiller que también lo hace muy bien”.
Sa Carbonería. Isidor Macabich 3.
Jorge Dávilla lo tiene claro, en la isla de Ibiza el “templo para los amantes de la carne” es Sa Carbonería. Y lo es desde 2012, merced a trabajar piezas selectas. “Por la parrilla de Pablo Castillo pasan chuletones madurados durante 45 días y sabrosas piezas de black angus. Y en el interior se esconde un pequeño jardín íntimo y repleto de magia que bien merece una visita”.
Sa Trenka. Av. de Cala Martina, 64.
¿Apetece una paella? La recomendación de David Grussaute es acudir a Cala Martina, a este restaurante que lleva cuatro décadas despachando arroces y pescados “en un ambiente muy familiar, con buen servicio y la playa a diez metros”. Entre sus especialidades se cuentan también la langosta y el bullit de peix.
Santa Gertrudis de Fruitera
Bar Costa. Plaça de l’Església, s/n. Tel. 971197021.
Carga con la fama de vender los bocadillos más populares de la isla. No en vano, también se le conoce como ‘el bar de los bocatas’. “No se complican: hacen su propio pan de llonguet, tostado y con bien de relleno, de vientre, de jamón… Venden esto y ya está. Triunfan, está siempre petado”, enfatiza David Grussaute.
