David Molina (AIWS y Wine Coacher)

Redacción

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«El Master Wine puede esperar, ahora el objetivo es Outlook Wine»

David Molina (AIWS y Wine Coacher) 0
David Molina

David Molina es una de las personas con más reputación dentro del panorama de vino de nuestro país, tiene una gran visión global del negocio del vino y una sensibilidad especial para la cata.

Es un crack silencioso, humilde y muy respetuoso, compartir una charla con él es una experiencia clarificante que te ayuda enfocar con buena perspectiva un mundo a veces demasiado complicado.

Su carrera profesional lo ha llevado a ser sommelier en el restaurante Sant Pau, en Sant Pol de Mar, y a formar parte de empresas líder del sector como Vila Viniteca o Mas Perinet.

Después de haber viajado a Londres para estudiar durante 2 años el Diploma de WSET, ha comenzado recientemente el proyecto Outlook Wine – The Barcelona Wine School, una de las empresas más innovadoras en cuanto a formación vinícola de calidad. Con el apoyo y colaboración de Antonio Palacios y Ferran Centelles han emprendido esta andadura, que nos comenta en las próximas líneas.

¿Podrías explicarnos que es el WSET?

WSET es una institución de peso, renombre y prestigio internacional con sede en Londres y dedicada exclusivamente al conocimiento y la formación en vino. Está considerado el pilar fundamental en estudios para aquellos que aspiran a acceder al MW. Las siglas “WSET” son las iniciales que definen la institución “Wine & Spirits Education Trust”. El éxito de su formación se fundamenta en su eficiente estructura, rigor y niveles de estudios bien definidos que la acreditan como un referente de profesionalidad en el sector. Como resultado de ello WSET está representado en 50 países en todo el mundo. Cada vez más en el extranjero, los profesionales del sector (producción, distribución y canal HORECO) pasan por la formación WSET, aunque sorprende el número de asistentes no profesionales como consumidores, aficionados, gourmands, etc, que estudian y obtienen las titulaciones WSET.

¿Después de tu abultada trayectoria profesional por qué decides trasladarte a Londres con el único motivo de estudiar el Diploma de WSET?

Considero que, con el paso del tiempo, llega un momento en el proceso personal evolutivo de cada uno, al menos en mi caso, en el que necesitas descubrir o profundizar más en aquellas cosas que te dinamizan. Necesitaba vivir en persona y conocer lo que sucede más allá de nuestras fronteras. Es entonces cuando te das cuenta de tu propia realidad y te das cuenta de que la formación en nuestro país tiene aún mucho campo para evolucionar y desarrollar. Después de un tiempo viajando por distintos países, realicé análisis comparativos de distintas instituciones en formación sobre la industria del vino en general. Llegué a la conclusión de que WSET era la mejor opción por su atractivo y completo programa de estudios, reconocido internacionalmente ya desde 1969.

Una de las partes importantes de tu nuevo proyecto, Outlook Wine, es la realización de cursos internacionales y certificados WSET. ¿Qué se puede encontrar detrás de estas cualificaciones?

La institución WSET te enseña a analizar y a pensar mejor. Aprendes a utilizar la información de forma inteligente, combinándola bien con la experiencia para así exponer conclusiones argumentadas sobre el vino y todos los aspectos relacionados con él de forma más rigurosa y solvente. Con los estudios WSET se establece, además, una estructura sólida de cata y enseña a opinar con criterio sobre el perfil sensorial del vino. En resumen, te va convirtiendo poco a poco y con el tiempo en un mejor conocedor de la materia.

El Diploma del WSET está considerado el paso anterior al Master of Wine. ¿Te has planteado alguna vez lanzarte a ello?

Sí, de hecho he trabajado bastante en ello. Pero no es el momento, ahora el objetivo es el proyecto Outlook Wine, un reto personal e importante resultado de muchos años de planificación y pasión por el vino. El MW puede esperar. Mientras tanto, pretendo con este nuevo proyecto aportar con humildad un granito de arena en la formación de profesionales del sector, además de ofrecer una excelente oportunidad al consumidor, aficionado o gourmands de conocer más y mejor sobre lo que tanto les gusta, el vino. De momento el MW esta en stand-by esperando a que llame otra vez a su puerta. Iniciarse en ello es un proceso de adaptación y organización mental importante.

Outlook Wine se dedica también al Wine Coaching y al Wine Consultancy, ¿en qué consiste?

Wine Coaching es un método innovador en la formación rápida sobre la materia de vino. Consiste fundamentalmente en un programa diseñado a medida y personalizado para cada persona y puesto en práctica a través de sesiones individuales entre el alumno y el coacher. Sorprende la rapidez y efectividad del método con la que los alumnos logran sus objetivos con eficacia. Una excelente opción para optimizar y rentabilizar el tiempo, algo de lo que disponemos poco hoy en día. Sin lugar a dudas es un método revolucionario y el feeback de los alumnos es muy positivo. Wine Consultancy es una sección del proyecto que nace de una join venture entre Laboratorios Excell Iberica y Outlook Wine. Wine Consultancy realiza los análisis químicos de vinos más sofisticados, combinado y contrastado con una amplia y rigurosa descripción de cata desarrollada por un panel de cata altamente cualificado. Es un servicio de gran utilidad para productores, distribuidores e importadores de vino, fundamentalmente.

Cuestionario “Uno de los nuestros”

¿Un vino para probar antes de morir?

Un sueño imposible. Me gustaría poder repetir y rememorar el día en que abrí y disfruté con buenos amigos de un Château Margaux 1990, creo que fue en el año 2001, recuerdo con claridad y definición el momento pero no el día. Aquella botella fue sencillamente sublime, más allá de lo habitual entre los grandes de verdad. Un arco iris de registros aromáticos bellísimos expresándose de una forma sin igual y como en pocas ocasiones he sentido. La concentración harmoniosa del comportamiento en boca era sencillamente pura y única, irrepetible e inolvidable. ¡Una botella sentida que me llevaré conmigo a la otra vida!

¿Cuál es el último vino que has comprado?

Un riesling alsaciano, Domaine Ostertag Grand Cru Riesling Muenchberg 2001, ¡terrorífico!

¿Un referente en el mundo del vino?

El rigor, seriedad y precisión de Sam Harrop MW. Fue de los pocos selectos y privilegiados que obtuvieron el MW en tres años y superando las pruebas a la primera con altas calificaciones. Un fuera de serie donde los haya. Una combinación de conocimiento detallado, experiencia, sensibilidad refinada en el análisis, pragmatismo sensorial y argumentos sólidos. Bajo mi punto de vista, la esencia más purista de lo que transmiten las instituciones WSET y MW. Para Robert Parker sería un 100 puntos +.

¿Con qué maridaje te has emocionado?

Con una becada y un nebbiolo bien madurado. ¡Sumible impacto sensorial! Bruno Giacosa 1996 Barolo Falleto después de 10 años de cuidadosa y excitante evolución en botella.

¿Una carta de vinos de un restaurante?

El Celler de Can Roca y Monvinic, ¡para divertirse a lo grande con ambos y en buena compañía!

¿Una bodega para la historia?

Château Latour sin parpadear y, con tu permiso, Diamond Creek (Napa Valley) y Dauvissat (Chablis), entre muchos otros.

¿Tu variedad preferida?

Tengo varias, pero al margen de las preferencias no puedo obviar la grandeza y reconocer el cabernet como el buque insignia entre las tintas. Es, sin duda alguna, la vinífera más sorprendente por su capacidad de adaptación a distintas condiciones, su increíble versatilidad enológica y potencial para emocionar con suculentos vinos por si sola o acompañada de otras viníferas. Mencionar como no Pauillac, Rutherford, Margaret River, Coonawarra, Bolgueri, Colchagua, Stellenbosch, etc, con el permiso de la añada y de un meticuloso productor, claro está. Lamentablemente, hay muchos productores poco comprometidos con la calidad que la exprimen hasta límites donde los vinos se desvirtúan totalmente, lo mismo que sucede con otras variedades.

¿Puede terminar la frase? No quite el ojo a…

… Las respuestas que tienen los mercados ante las constantes olas de nuevas tendencias en los vinos. El consumidor puede no ser conocedor, pero el mercado si lo es, además de inteligente, y es el que finalmente decide que vinos se venden y cuáles madurarán lentamente con el tiempo en las bodegas, almacenes de distribuidores o estanterías de las tiendas especializadas sin venderse. El éxito de los países productores emergentes y líderes radica en el análisis y estudio previo de los gustos que los distintos mercados demandan y quieren. Me pregunto porque no hacemos lo mismo en España…