Tatin de turrón

¿Receta express? ¿Qué entiendo yo por receta express? Os explico y pondré un ejemplo.

Los que somos cocineros habitualmente tenemos que oír por parte de amistades, generalmente femeninas, como al enterarse de nuestro oficio, les dicen a nuestra pareja: «¡En casa comerás como una reina! ¡Te debe hacer unos guisos de rechupete!»

¡Pues no! Nada más lejos de la realidad. Después de pasarnos entre 8 y 12 horas diarias cocinando. ¿A quién coño le quedan ganas de llegar a casa y ponerse a cocinar?

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Crema de turrón.

Por ahora todo bien. Nada fuera de lo normal. Pero claro. El día que tu pareja te informa… «Mañana vienen a cenar los Fulanito y los Menganito. ¿Me harás quedar bien, verdad? ¡Que saben que eres cocinero!

¡Ya está! El único día de fiesta que tienes a la semana y te toca cocinar. Tú en tu interior vas pensando. «Si luego a los cocineros nunca nos invitan a las casas por aquello de… «Huy , como te voy a cocinar a ti con lo que tu sabes! ¡Si yo solo se hacer tortilla de patata!»

Y sin ganas algunas buscas y rebuscas por la nevera y los armarios para ver qué puedes aprovechar, combinar o inventar para quedar bien sin demasiado esfuerzo. Y como resultado, entre otras cosas, me ha salido esto. Que para no haber comprado nada, creo que dio el pego y les gustó.

Así que rescaté de mi cocina lo siguiente: 1 Turrón de jijona del blando. El que siempre sobra de la cesta de Navidad. Seis manzana de las que se lleva mi hija al cole. Un vaso de leche. Helado de vainilla del que quedó del verano pasado. Azúcar, canela, piñones, láminas de almendra y un sobre de Nescafé.

Trituramos el turrón con la leche hasta obtener una crema/sopa de una textura no demasiado liquida. La reservamos en la nevera. Pelamos y cortamos a dados las manzanas, y las salteamos en una sartén con el azúcar y la canela en polvo. Que queden dorados.

En un plato sopero con ayuda de un molde pondremos los dados de manzana tibios. Hacemos una quenelle con el helado de vainilla y la pondremos encima de la manzana. Espolvoreamos un poco del Nescafe por encima del helado y las láminas de almendra tostadas y los piñones.

Y ya con los platos en la mesa y con una jarrita, dispondremos la crema de turrón en el plato. El detalle de la jarrita no sirve más que para darle pomposidad he importancia al plato delante de aquellos que te han hecho currar cuando en realidad te apetecía descansar.