La Rioja Alta, S.A. ha comenzado a instalar en sus viñas albergues destinados a cobijar insectos y arácnidos beneficiosos para el cuidado de las cepas. Estas instalaciones, que la bodega irá situando progresivamente en sus fincas, permitirán el cobijo de microfauna «aliada».
Según, Roberto Frías, director de la sección agrícola de La Rioja Alta, S.A., esta iniciativa «ayudará a realizar una defensa fitosanitaria muy selectiva y, sobre todo, muy respetuosa con el medio ambiente así como a incrementar la biodiversidad de nuestros viñedos». Y añade «hay especies, como las mariquitas, que son indicadores de una buena calidad ambiental en las viñas y debemos preservarlas asegurando su proliferación ya que, sobre todo, en su estado juvenil de larva depredan con voracidad extrema pulgones, ácaros y cochinillas, la mayoría de ellos perjudiciales para el viñedo y otros cultivos. Otras especies interesantes a las que pretendemos favorecer son tijeretas, arácnidos, crisopas y avispillas que pueden depredar sobre trips, ácaros, polilla del racimo y piral».
Esta iniciativa se incorpora a la batería de medidas medioambientales que el grupo bodeguero La Rioja Alta, S.A. lleva implementando desde hace décadas tanto en sus instalaciones como en los viñedos plantados que actualmente dispone entre sus cuatro bodegas.