Jancis Robinson: Estoy muy a favor del vino en lata

Enlatar el vino es una tendencia creciente en varios países que conquista a nuevos públicos y a profesionales como Robinson

Pilar Salas

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Jancis Robinson, la mujer más influyente de toda una industria del vino durante más de cuarenta años, recibirá el Gueridón de Oro del 25º aniversario de San Sebastián Gastronomika y ha anunciado cuál es su última batalla: el vino en lata, principalmente para acercarlo al público joven.

 

«Estoy muy a favor del vino en lata y cada vez los hay mejores», ha dicho la autora de libros míticos como «The Oxford Companion to Wine», «The World Atlas of Wine» o “Wine Grapes” (la Biblia de los profesionales del vino),

 

Considera Robinson que varios factores han alejado a los jóvenes del vino: «El incremento de los precios, que se presente en una botella de 75cl de cristal, rompible, y con un corcho. Para probar un sorbo de un vino que no sabes si te va a gustar o no tienes que comprar una botella».

 

Por eso ha hecho del formato lata una de sus luchas, también para disminuir la huella de carbono que supone la producción y el transporte de botellas.

 

Robinson, que fue la primera mujer que consiguió el título de Master of Wine sin ser sumiller ni enóloga y es, según la revista Decanter, la crítica y periodista del vino más respetada del mundo, ha vivido en sus 43 años de trayectoria profesional la evolución del sector, desde la tendencia a «imitar burdeos y borgoñas» de finales del siglo pasado a los «más frescos, ligeros y menos alcohólicos» del presente.

 

También que son cada vez más las bodegas que «celebran la identidad de sus territorios» y prestan atención a la agricultura ecológica y la producción de vinos naturales y biodinámicos, «y eso es muy importante ahora».

 

Porque los viñedos «se ven muy afectados por el cambio climático y en algunos lugares las vendimias se han adelantado hasta dos semanas», lo que está provocando un desplazamiento de los viñedos en el mundo «hacia el el Polo Norte y el Polo Sur, huyendo de la calidez del Ecuador».

 

Esta semana, Robinson ha participado como jurado de la vigésima edición de la competición internacional Copa Jerez, que busca la mejor armonía entre un menú compuesto por entrante, principal y postre, y vinos del Marco.

 

De este certamen, que acoge Jerez de la Frontera y en el que participan siete países -entre ellos España a través del equipo formado por el cocinero Cristóbal Muñoz y la sumiller Laura Rodríguez, de Ambivium*- , ha destacado el nivel de los participantes, que muestra cómo cada vez más restaurantes del mundo incorporan jereces a sus bodegas y que «si bien no es el único medio para promocionar estos vinos, es uno muy bueno».

 

Enamorada de ellos, indicaba el necesario vínculo que deben mantener con la cocina: «Siempre hay que entenderlos y conocerlos con comida», más allá del aperitivo o el postre.

 

También, en un breve encuentro con un reducido grupo de periodistas, hablaba sobre la evolución de los jereces, apuntando como hito en las últimas décadas el que se hayan cambiado los catavinos por copas que «permiten expresarse a estos vinos». «Igual que el champán o el oporto, los vinos del Marco necesitan una copa especial para que se aprecien todas sus características. Me gusta que se hayan dado cuenta».

 

La próxima cita en España de esta periodista especializada será en San Sebastián Gastronomika, que se celebra del 9 al 11 de octubre, donde recogerá el Gueridón de Oro por una trayectoria que también incluye una serie histórica sobre el vino emitida en la BBC, ejercer como consejera de vinos para la bodega de la familia real británica o escribir una columna semanal en el Financial Times y para su blog jancinrobinson.com, que cuenta con casi una veintena de colaboradores, entre ellos el sumiller español Ferran Centelles.

 

«Siempre es un placer ser premiada en un país que no es tuyo», reconoce quien espera que el nacimiento de una nieta no le impida asistir al Kursaal a recoger su galardón.

 

En esta XXV edición de Gastronomika también se entregará el Premio Homenaje a Ferran Adrià, por «liderar la última gran revolución de la gastronomía; una revolución que ahora ha trasladado a la investigación» y el de periodismo Pau Albornà y Torras al crítico gastronómico Rafael García Santos.