La emblemática coctelería inaugurada por Miquel Boadas en el 1933 celebró ayer su 75 aniversario con un acto social en el recinto de La Dama del Paraigües de Barcelona organizado por Grup Paradís. Actualmente, Maria Dolors Boadas y José Luis Maruenda son los dueños del local y para la ocasión ofrecieron a los invitados una barra libre con los cócteles más históricos y significativos que han pasado por su barra durante estos 75 años de vida. Los cócteles se acompañaron de los habituales sancks títpicos de la casa: canapés, galletitas… Uno de ellos fue el más solicitado, el británico canapé de pepino y mantequilla al curry.
No podían faltar el Dry Martini y el Mojito, que se han elaborado siempre siguiendo la receta original. Miquel Boadas aprendió el arte del cóctel en el mítico Floridita de la Habana, donde Hemingway era cliente fijo. A día de hoy el mojito se elabora en el Boadas siguiendo al pie de la letra los pasos que ordena la tradición cubana. Los ingredientes son ron añejo, soda, menta, azúcar y hielo troceado. También hubo tarta de aniversario. Concretamente fueron 75 tortells de la pastelería Flor de Lis de Barcelona, el postre más representativo que se sirve en el restaurante Casa Leopoldo.
En la esquina de las Ramblas con la calle Tallers, el Boadas conserva la estilo de decoración de los años 30. Hoy en día, cuando la renovación y la especulación hacen peligrar la perduración de los establecimientos de siempre, es significativo que la coctelería Boadas, la primera de Barcelona y una de las pioneras de España, resista a los embates del tiempo. Felicidades!