La cocina se vuelca con las víctimas de la DANA

Los cocineros se activan para alimentar a la población más necesitada por la catástrofe

Pilar Salas

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La solidaridad de los cocineros en momentos trágicos nunca falta. Ya no es solo una gran estructura consolidada en tragedias como World Central Kitchen (WCK), liderada por José Andrés y capaz de movilizar a cocineros nacionales y locales, sino también iniciativas como la de Ricard Camarena, que tanto desde sus restaurantes como desde la fábrica Frescos Delisano (Cheste) ha repartido hasta 25.000 raciones de comida al día.

 

«Es una tragedia, un drama absoluto, no hay luz, no hay agua, está todo destrozado», nos cuenta desde primera línea del horror Pepa Muñoz (El Qüenco de Pepa, Madrid), activista de WCK. Lo único positivo de esta DANA es la respuesta solidaria. No sólo colaboran cocineros valencianos, sino que se han sumado otros como la propia Pepa o el equipo de Cañitas Maite (Albacete) para dar comida caliente a la población y a los equipos que la asisten.

 

Suministran más de 35.000 comidas diarias, pero también mantas, palas o maquinaria para achicar agua. Aquí hace falta de todo.

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Reparto de paella por la DANA

Pero hay que donar mirando al futuro, advierte Muñoz. «Hay que seguir donando, pero dosificando porque esto va para muy largo y no los podemos dejar solos».

 

Esta cocinera ha vivido movilizaciones de ayuda en la pandemia o en el volcán de La Palma, pero en esta ocasión se ha asombrado por un «caos generalizado» en el que resulta difícil acceder a los lugares que más lo necesitan, si bien WCK ha conseguido acceder a los «pueblos más críticos».

 

Ricard Camarena y su mujer, Mari Carmen Bañuls, se organizaron para aprovechar las instalaciones de Frescos Delisano ((Cheste), empresa con la que colaboran en la elaboración de productos como croquetas, para preparar comidas al por mayor. Hasta 25.000 raciones repartidas en un solo día en 14 municipios afectados de la Comunidad Valenciana.

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Ricard Camarena en la DANA

La pareja se activó en su grupo de restaurantes en Valencia, uno de los cuales está distinguido con dos estrellas Michelin, pero se dieron cuenta de que su alcance sería mayor en las instalaciones de la fábrica de Cheste, adonde a su llamamiento llegaron donaciones de alimentos para hacer guisos, platos de pasta o croquetas. Mari Carmen fue quien se encargó de la organización, tanto de llamar a Ayuntamientos para saber las necesidades de sus ciudadanos como a posibles donantes de productos, de los que han conseguido decenas de palés de alimentos para repartir.

 

La respuesta fue abrumadora. Y hasta 200 cocineros entre profesionales y amateurs se ofrecieron a colaborar. Además de personas que se dispusieron a repartir la comida entre 14 municipios afectados, «siempre en coordinación con los Ayuntamientos», nos explican.

También cocinan para los trabajadores públicos que colaboran en las tareas de limpieza, búsqueda de desaparecidos y recuperación de la normalidad en las localidades.

 

Este lunes han dejado, por el momento, de cocinar en Cheste, donde la producción era mucho más grande, pero siguen colaborando en los restaurantes del grupo Ricard Camarena. «Nos han dicho los Ayuntamientos que necesitaban maquinaria pesada, pero estamos cocinando para los bomberos», explican.

 

El equipo del grupo Ricard Camarena está echando horas pero muy satisfecho por poder ayudar en estos momentos difíciles. «Nuestra obsesión es llegar a los sitios donde realmente hace falta», dice el cocinero.

 

Además de Paiporta, Masanassa, Picasent, Sedaví, Algemesí, Montroi, Monteserrat, Chiva, Pedralba, Torrent, Catarroja y Calicanto. No les fallarán