La moda de las tiendas efímeras se traslada a la gastronomía
Desde hace unos años han proliferado, en las grandes ciudades, las tiendas efímeras, popularmente conocidas como pop up stores. Marcas de prestigio alquilan temporalmente un local para estar presentes con una colección. Esta moda se comienza a trasladar ahora al mundo de la gastronomía. Llegan los pop up restaurants.
Un ejemplo de restaurante efímero es el nuevo The Secret Room. En realidad, se trata de un salón de belleza ubicado en un primer piso del Paseo de Gràcia de Barcelona, que durante el mes de marzo, los jueves, viernes y sábados por la noche y los domingos a mediodía se transformará en un restaurante.
La oferta culinaria se basa en la cocina tradicional americana. Se ofrece un plato principal (costillas de cerdo, pollo a la barbacoa, pulled pork sandwich…) y un acompañamiento (ensalada César, ensalada de col, hummus, guacamole, pico de gallo ochips). El abastecimiento se ha resuelto gracias a la marca CreOlé, especializada en comida barbacoa precocinada con la filosofía Km 0. La carne procede de Vic y se cocina con madera en hornos 100% a leña de roble americano y sin conservantes.
El postre se deja en manos de Crustó, una de las mejores pastelerías barcelonesas, que ofrece platos típicos americanos como el brownie o el cheesecake. La cena se puede regar con cerveza y vino (Casa Mariol). Todo por unos 20 euros.
Se trata de una iniciativa llevada a cabo por The New Black y good2b.es que tiene algo de clandestino, ya que formalmente el local es un centro de belleza. Por ello, en algunas ocasiones la puerta principal está cerrada y hay que llamar por teléfono y dar una clave.
En The Secret Room no sólo está este restaurante efímero, sino que es un espacio en el que se van organizando distintas actividades, como un afterwork los jueves a partir de las 17.00 (The Corner) o The Catas, una vez al mes un maridaje de vino y ostras.
Si te apetece conocer esta iniciativa, sólo has de escribir a reservas@we-pop.com.