Si hay algo en lo que se insiste desde el podium de la cocina es en la importancia de la formación de los profesionales de la restauración. El que definió Ferran Adrià como «el sector con más talento de la gastronomía» tiene en el aprendizaje un aliado para convertirse en un gran profesional, al fin y al cabo, una de la claves del éxito en cualquier carrera.
En España existen diversos centros especializadas en formación gastronómica. Desde universidades (Rovira i Virgili, La Rioja, Valladolid, Cádiz, Extremadura, Barcelona -CETT-; CEU Cardenal Herrera, Mondragón -Basque Culinary Center-; Europea del Atlántico o la Politécnica de Cataluña, por citar algunas) en las que se ofrecen grados de Gastronomía, Ciencias Culinarias o Enología hasta escuelas (Cordon Bleu, Hofmann, ESHOB, EUTH San Pol, EspaiSucre o Aiala, entre otras).
Algunas de ellas, como Hofmann, Espai Sucre o Aiala fueron fundadas por cocineros en activo, propietarios -a su vez- de restaurantes. Mey Hofmann, Butrón-Sagués o Arguiñano, respectivamente, son los nombres que se encuentran detrás de las puertas de estas escuelas. «Con esta escuela, fundada hace 20 años, he querido devolver a la sociedad, lo que ella me ha dado a mí. Para ello, no hay nada mejor que una escuela para que chicos y chicas de aquí o de fuera de aquí, tengan un oficio digno con el que se puedan ganar la vida en Euskadi o a 10.000 km», afirma el mediático cocinero-empresario Karlos Arguiñano. Aiala, al igual que muchos centros de formación, ha abierto ya el periodo de inscripción para los cursos de la siguiente temporada. Entre ellos, Raúl González, su director, afirma que uno de los cursos de los que más orgulloso se siente es el del Master de Gastronomía, que cuenta ya con 18 años de historia y que en su siguiente edición contará con «nuevos contenidos y novedades».