Espumosos de California

Cristina Alcalá

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Los ‘sparkling wines’ se instalan en el estado norteamericano

El vino espumoso gusta en California. Los sparkling wines parecen estar de moda, aunque la realidad es que su nivel de consumo no es comparable a los vinos blancos y tintos. Lo que sí se aprecia sin ninguna duda es que las burbujas van ligadas a status y celebración. Algo también muy habitual en el resto del mundo, una cultura que aquí empieza a notarse desde hace algunos años. De ello se encargan las bodegas que las elaboran, tanto las norteamericanas como las empresas que han instalado aquí hace años.

Se producen espumosos en todo el estado de California. Cerca de 40 bodegas los producen en la zona central (principalmente en Paso Robles) y sur de California (Temecula Valley y Escondido) con variedades como Viognier o Sauvignon Blanc y en muchos casos vinos orientados a tomar con el postre y con mucho azúcar residual. Pero la mayor concentración de bodegas, tanto en número como en calidad, está en el norte de California: Napa, Sonoma y Mendoncino.

De California

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Etiqueta Korbel Cellars.

De todas ellas sobresale una: Korbel Cellars en Russian River Valley. Lo hace no tanto por la calidad de sus espumosos, sino porque es las pocas bodegas que pueden seguir manteniendo la palabra champagne en sus etiquetas. Un litigio que desde hace años mantienen con las autoridades francesas. Korbel Cellars fue fundada en 1882 por tres hermanos checoslovacos que se dedicaban, entre otros negocios, a la madera. Hoy es uno de los mayores productores de vino de Estados Unidos y se autodefinen como los elaboradores del champagne de Estados Unidos. Producen también Brandy Korbel, aguardiente y vinos tranquilos. Su arma para popularizar sus espumosos es que que se han servido en todas las inauguraciones de los presidentes de Estados Unidos. Pero los cierto es que después de catar muchos de ellos (Natural, Blanc de Noir, Sec, Sweet Rosé) la calidad no pasa de correcta. Al menos, en los precios son comedidos: entre 12$ y 20$, por debajo de la media californiana. A pesar de ello, la visita a la bodega merece la pena. Un gran edificio con museo rodeado de jardines e históricas secuoyas.

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Tasting room de Iron Horse.


Iron Horse en Green Valley es otra de las referencias de espumosos en el norte de California. La entrada a la bodega es espectacular: palmeras, camino entre viñedos y unas vistas maravillosas. Situada en una colina del valle, los propietarios  Audrey y Barry Sterling, compraron las primeras hectáreas en 1976. Su primera cosecha fue dos años más tarde y en 1980 empezaron a elaborar vinos espumosos. Su logotipo, un caballo de hierro en una veleta, hace referencia al tren que pasaba por la zona a principio de siglo y que fue descubierto mientras preparaban el terreno. También saben aprovechar muy bien el marketing que les vincula a la política, también se sirven en la Casa Blanca, y hacen tiradas especiales para cocineros norteamericanos e incluso para Disney. Son referencia de calidad para el consumidor norteamericano. Sus espumosos son envejecidos entre tres a ocho años, elaborados con un 70%-80% Pinot Noir y 20%-30% Chardonnay y entre cuatro y sietes gramos de azúcar residual.

De Francia

Entrada a Roederer Estate
Entrada a Roederer Estate.

Cuatro grandes maison francesas se instalaron en el norte de California entre las décadas de 1980 a 1990. Domaine Chandon (Napa Valley), Mumm Napa (Napa Valley), Domaine Carneros (Napa Valley, Champagne Taittinger) y Roederer State (Mendocino).

Todas las bodegas tienen un denominador común: posicionar sus espumosos en la gama premium. Todos elaboran vinos tranquilos posionados en una gama media-alta de precios y han apostado por la región más turística de California, Napa Valley (excepto Roederer Estate).

En 1982 la Maison Louis Roederer decidió instalarse en Anderson Valley, cerca de la costa de Mendocino (región más al norte de California). Roederer Estate Brut sigue con la filosofía de mantener la propiedad completa de sus viñedos y la incorporación de vinos reservas de roble envejecido para sus cuvée. Vinos entre 21$ y 45$, de los mejores en calidad y precio.

Las bodegas de capital francés incorporan a su filosofía un marketing dirigido al consumidor final basado en el atractivo del glamour y momento de consumo. Los tasting room está abarrotados de gente (como sucede en la mayoría de las bodega de Napa Valley) que disfruta de las vistas del valle mientras degustan los vinos acompañados de quesos, la alternativa más generalizada.

De España

Gloria Ferrer
Parte de las instalaciones de la bodega de Gloria Ferrer.

Gloria Ferrer es el nombre de la bodega que el grupo Freixenet tiene en Carneros (Sonoma Valley), la primera que se instaló en esa región. Fue en el año 1982 cuando compraron las primeras hectáreas de viñedo y en 1986 cuando inauguraron su bodega al estilo de una clásica masía catalana. Tener una bodega en California fue el sueño que tenía Pedro Ferrer y que se vio truncado por la Guerra Civil española. Su hijo José Ferrer lo cumplió décadas después. Además de los diez tipos de espumosos que comercializan, también elaboran vinos tranquilos con Pinot Noir, Chardonnay y Merlot.

Artesa, nombre de la bodega que Codorniu tiene en Carneros, fue construida en 1990 por el aquitecto catalán Domingo Triay. Elaboran solo un vino espumoso que no se comercializa y que solo puede degustarse en su bodega. Artesa ha apostado por el mercado de los vinos tranquilos en California.

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