Vins de Finca Qualificada, la esencia del paisaje catalán en la copa

Representan la fuerza del terruño, el máximo exponente de la vinculación entre la bodega y su territorio, y son un reconocimiento a su esfuerzo, constancia y exigencia en el viñedo. Estos son los catorce vinos insignia que Cataluña quiere compartir con el mundo.

Sandra Hernández

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Actualmente Cataluña produce los mejores vinos de su historia, una realidad que la Generalitat de Catalunya desea poner en valor y difundir por todo el planeta. Para ello apuesta por la distinción Vinos de Finca Cualificada, otorgada a vinos bodegas de prestigio que llevan al menos 10 años en una DP protegida, que se extraen de un territorio propiedad de la bodega e inferior al término municipal, cuyo proceso de elaboración asegura la calidad de la uva en la vinificación mediante traza específica, y que poseen características cualitativas propias y muy singulares.

 

Viñedos donde se elaboran Vinos de Finca en Cataluña
Viñedos donde se elaboran Vinos de Finca en Cataluña

 

Por lo tanto, el nombre del Vino de Finca Cualificada (VFQ) está ligado a los viñedos de los que se obtiene, por lo que, además de aumentar el prestigio del sector vitivinícola catalán, es una herramienta extraordinaria para lograr la preservación de su rico patrimonio vitivinícola. El objetivo para 2025 es que todas las Denominaciones de Origen catalanas cuenten con esta honorable certificación; actualmente existen catorce VFQ en Cataluña.

 

Jean Leon reina en el Penedés

Vins de Finca Qualificada, la esencia del paisaje catalán en la copa 1

La bodega Jean Leon disfruta desde 2013 de cuatro vinos considerados de Finca Cualificada que recorren la vida de leyenda de Ceferino Carrión Madrazo, verdadero nombre de su fundador. Fresco y de tanino dulce, el merlot Viña Palau es un homenaje a su ciudad natal Santander, punto de partida de una trayectoria llena de éxitos que realmente empezó en Le Havre, el puerto francés donde embarcó como polizón rumbo a Estados Unidos.

 

Da nombre a un coupage de cabernet sauvignon y cabernet franc muy elegante en nariz y potente en boca, con notas torrefactas y matices especiados.  De polizón a taxista en Nueva York, y de ahí grandes avatares antes de recalar en Beverly Hills y fundar el restaurante La Scala, que fue siempre un punto de encuentro para artistas y almas inconformistas. Por ello titula a un intenso y complejo Gran Reserva elaborado 100% a base de cabernet sauvignon. El cuarto es Viña Gigi, un 100% Chardonnay nacido de la viña bautizada con el nombre de su hija, en el que las notas lácticas están en perfecta armonía con la fruta tropical y matices de pan tostado y especias.

 

Y dentro también de la DO Penedés la Bodega Eudald Massana posee el Vino de Finca Calificada Avi Ton, procedente de una viña de xarel·lo plantada en 1945 por Ton Massana, 8ª generación de la familia propietaria de la finca, con el que hace un homenaje a su padre  Eudald. De color dorado pálido con tonalidades brillantes, embriaga con aromas florales como el de almendro y frutas maduras de piña o membrillo, que transmite sensación de frescura pese a su cuerpo untuoso.

 

La garnacha del Priorat en cuatro extraordinarios vinos

Vins de Finca Qualificada, la esencia del paisaje catalán en la copa 2El viñedo de Clos Mogador es un gran anfiteatro de llicorella, suelo de pizarra que distingue a los vinos del Priorat y que llena de riqueza cada botella de Clos Mogador, un VFQ a base de garnacha, syrah, cabernet y cariñena cuidadas con mimo y trabajadas con extraordinaria maestría por los herederos de Isabelle y René Barbier hijo, que mantienen viva una elaboración artesanal digna de las mejores tradiciones de los grandes crus. Y también de una finca de llicorella adusta, la bodega Vall Llach posee un viñedo emblemático plantado en 1900 y con casi un 80% de pendiente. Con él elabora su vino insignia Mas de la Rosa, a base de cabernet sauvignon, garnacha y cariñena.

 

Cierran la lista de VFQ de la DOQ Priorat dos extraordinarias referencias de la Bodega Mas d’en Gil, un celler familiar situado en Bellmunt, una de las fincas con más biodiversidad e historia del Priorato. De allí se extraen Clos Fontà, elaborado con garnacha y cariñena de viñas viejas, que son la representación más precisa de su terroir. Es un vino complejo que concentra fruta negra y mineralidad. El otro es Coma Blanca, considerado “La Grande Dame” de la casa, una joya de matices profundos y gran persistencia a base de garnacha blanca y macabeo, plantadas antes de 1945 y rodeadas de bosque de pinos y zonas agrestes.

En el oeste, la garnacha peluda más antigua

Siguiendo en el oeste, el monovarietal Teixar es el primero y, de momento, único vino que tiene el reconocimiento de Vino de Finca de la DO Montsant. Un vino icónico con el que la bodega Vinyes Domènech quiere demostrar que el auténtico tesoro es su viña de garnacha peluda, una de las más antiguas de Cataluña, que concentra sabiduría de vendimias pasadas durante los 70 años que tiene de vida.

Por su parte, la DO Terra Alta cuenta con Mas Edetària Selecció, elaborado por la bodega Edetaria con uvas de garnacha peluda garnacha fina y cariñena. De compleja expresión aromática, viste un color rojo intenso, y ofrece aromas balsámicos y mentolados, antes de frutas rojas maduras, notas a especias, cacao y hoja de tabaco.

 

Al noreste, un terruño de gran mineralidad

Cruzando la región, el extremo noreste nos obsequia con tres vinazos de dos Denominaciones distintas. De la DO Pla de Bages es el cabernet sauvignon Finca 3.9 de bodega Abadal, un vino elegante y de profunda identidad, con fruta vestida de entorno aromático y balsámico y presencia de mineralidad. Pura expresión del terroir al igual que su vecino Arnau Oller, homenaje al fundador de la bodega Heredad Oller del Mas, elaborado con merlot y picapoll negro.

Con el paisaje como principal protagonista, es un vino que destaca por su nobleza y complejidad. Por último, la DO Empordà tiene su máxima representación en el monovarietal de cariñena V d’O 2, que reconoce el prestigio de la pequeña bodega familiar Vinyes d’Olivardots a lo largo de 10 años. Un proyecto donde Carme y Carlota, madre e hija, enólogas y viticultoras, elaboran vinos singulares a través de la recuperación de variedades autóctonas y diversidad de sus terruños.

 

Bodega Vinyes Domènech
Bodega Vinyes Domènech

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