Nacido en Alicante en 1973, Nazario Cano siempre se ha codeado bien con los reconocimientos: logró una estrella Michelin en El Rodat (Jávea) y otra unos meses después de incorporarse al grupo de ocio Odiseo de Murcia, donde también obtuvo dos soles Repsol. Allí ha estado cuatro años con la promesa de que «no es un adiós, es un hasta luego».
«Han sido cuatro años donde he aprendido mucho y estoy muy agradecido a la empresa por haberme dado la oportunidad de haber trabajado en un proyecto tan ambicioso y satisfactorio. Les deseo lo mejor a esta gran familia», afirma Cano.
Regresa a Alicante con cuatro de sus trabajadores más cercanos en Odiseo y con los que lleva trabajando desde hace muchos años, quienes estarán en la apertura del nuevo local del chef que espera abrir para Semana Santa del próximo año. «Se trata de situarme en mi casa, con la estrella Michelin y siempre bajo los parámetros de la guía, y luego expandirme en distintos sitios y es muy posible que Murcia sea uno de los primeros sitios a los que miraremos venir», asegura.
Su intención es crear una marca propia con la que expandirse con diferentes modelos hosteleros, aunque sin dejar atrás una cocina mediterránea con el mar como hilo conductor y sin renunciar a los guiños a otras gastronomías.
Agradecimiento
Por su parte, el director de la división de Hoteles y Restauración de Orenes, José Antonio Trujillo, se ha mostrado muy agradecido por la dedicación y los años de profesionalidad de Nazario. «Le deseamos toda la suerte del mundo, porque además de un gran profesional ha dejado marcada una forma de entender la gastronomía en Odiseo», asegura.
Además, Trujillo afirma que están trabajando desde hace un tiempo en evolucionar la carta del restaurante a un concepto donde el producto tenga más protagonismo, y que la empresa tiene más de ciento veinte cocineros para garantizar la solvencia gastronómica del centro de ocio.
«Abriremos el proceso de búsqueda porque queremos que en Orenes trabajen siempre los mejores profesionales, pero solo en Odiseo hay casi una treintena de cocineros para afrontar cualquier reto», decía Trujillo.